He visto el paraiso: arena blanca, agua cristalina, un fondo marino increible, tortugas, tiburones, peces de colores, luces brutales, banios infinitos , cervecita fria viendo atardecer y un poco de juerguilla nocturna.
Cuando los suenios se convierten en realidad, hay que intentar disfrutarlo al maximo, y yo me lo he tomado al pie de la letra.
Las islas Gili, al oeste de Lombok, son como un pulpo, una vez que desembarcas, ya te han enganchado con el tentaculo, e inyectado un chute de "vagancia soberana" .A pesar de la turistada, la simpatia de los locales te hace estar agusto y sentirte como en casa (pero con playita incluida). Asi que los dias pasan, y tu no puedes mas que alargar la estancia .
Tanta vagancia me ha entrado, que he tardado 7 dias en dar la vuelta a la isla (apenas 1 hora en bici). Y lo he hecho mas por verguenza que por ganas,...
Tras 8 dias en las Gili, ha tocado volver a Bali, probar un poco la vida nocturna de Kuta (solo por ver amanecer en la playa y despedirme de amigos) y decir adios a Indonesia y su maravillosa gente con mucha penita.
Y es que a quien se le habra ocurrido dar UN SOLO MES de visado para 17000 islas?? Definitivamente, Indonesia queda en mi lista de "pendientes", y a falta de un dia para que mi visa expire, he volado a Borneo (la parte de Malasia) para ver orangutanes y bucear en el mejor sitio del mundo (segun Cousteau). Veremos lo que Malasia nos depara,..
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